La aplicación reconoce los sentimientos


Las emociones desempeñan un papel importante en el trato con la tecnología. Sin embargo, ni siquiera los sistemas inteligentes son aún capaces de reaccionar adecuadamente a las emociones humanas.
En el proyecto EMOIO, Fraunhofer IAO, junto con el Instituto de Factores Humanos y Gestión Tecnológica IAT de la Universidad de Stuttgart, investiga cómo pueden utilizarse métodos neurocientíficos para deducir e interpretar las emociones a partir de las ondas cerebrales de los usuarios.
A continuación, las emociones identificadas se pondrán a disposición de un sistema técnico a través de una interfaz cerebro-ordenador (BCI), que podrá adaptar el diseño y el comportamiento de forma más específica a las necesidades individuales del usuario.
Junto con los socios del proyecto, Fraunhofer IAO presentó una primera demostración en directo de la interfaz cerebro-ordenador (BCI) desarrollada. Se mostraron a una persona imágenes con contenido emocional, como animales bebés o escenas de guerra.

El algoritmo busca en las señales grabadas patrones que se han identificado en diversos estudios previos como característicos de las emociones positivas y negativas.
De este modo, el algoritmo clasifica en pocos segundos la reacción del sujeto ante una imagen como positiva o negativa. A continuación, el resultado de la clasificación puede transmitirse a cualquier sistema técnico.
El estado emocional determinado por el algoritmo no sólo es relevante para los sistemas técnicos, sino también interesante para el propio usuario. Por ello, en Fraunhofer IAO se desarrolló una aplicación móvil que muestra al usuario la emoción clasificada en directo.