Un acto de cortesía

A pesar del jet corporativo de SAP, no encontraba el camino desde el balneario invernal de Davos hasta la gris Walldorf. Había nevado en Davos, el cielo estaba azul y se celebraba la Cumbre Económica Mundial. Pero, ¿cómo era en los tiempos del profesor Henning Kagermann, cuando la gente se reunía para la conferencia de prensa anual en Fráncfort del Meno? La sala era siempre demasiado pequeña.

Los periodistas y analistas lucharon por el derecho a formular preguntas. Hubo debates animados e informados y el tiempo se rebasó descaradamente. La trastienda de Walldorf era este año un triste espectáculo, con la presencia de unos pocos periodistas de las redacciones de los periódicos locales y los obligados corresponsales de las agencias de noticias... ¿preguntas emocionantes e insistentes? Ninguna.

Aunque sería muy emocionante averiguar cómo SAP ha podido conseguir finalmente un éxito y unos ingresos significativos con S/4, que figura a cero euros en la lista de precios de 2015. El Director de Tecnología, Bernd Leukert, no lo explicó, pero habló de verdaderas y muy gratas aportaciones.

El Director Financiero Luka Mucic relativizó que ciertamente también hay rentabilidad indirecta: Si alguien personaliza S/4, también necesita la base de datos Hana y algunos otros componentes de software de SAP, que son y seguirán siendo, en última instancia, facturables.

Además de todas las cifras IFRS y no IFRS, S/4 fue naturalmente el tema dominante. Al principio, ¡las cosas seguían yendo bien para SAP! Se habló de 2.700 clientes de S/4, ¡y nadie preguntó! Sin embargo, en la teleconferencia con analistas posterior a la conferencia de prensa sobre los resultados anuales, alguien preguntó: ¿Cuántos usuarios operativos de S/4 hay?

Bernd Leukert tuvo que admitir que sólo 100 de los 2700 usuarios de la línea S/4 están "vivos". Un resultado entre aleccionador y catastrófico, si se cree en las afirmaciones de SAP de que S/4 es un sistema ágil, inteligente y fácil de implantar.

Sin embargo, la promoción de S/4 a finales de 2015 parece haber funcionado, con algunos intrépidos clientes existentes de SAP abasteciéndose de licencias gratuitas. Veremos qué ocurre este año. ¿Y qué queda?

Sería un acto de cortesía hacia los clientes, socios, analistas y periodistas ser más transparentes, comprensibles y accesibles, de nuevo en el centro financiero de Fráncfort.

Habría sido un acto de cortesía que el estadounidense Bill McDermott hubiera vuelto a encontrar el camino a Walldorf, al menos para la conferencia de prensa financiera anual. Y habría sido un acto de cortesía afirmar claramente que los clientes actuales de SAP interesados en S/4 se enfrentan a una enorme oleada de cobros y que esto se traducirá en unos ingresos por licencias muy rentables para SAP.

S/4 no es un sucesor legal de ningún producto SAP existente. El "cambio de versión" sólo tendrá lugar mediante una nueva compra. A pesar de la cuota de mantenimiento, los clientes SAP existentes tendrán que adquirir nuevas licencias de S/4.

Esto puede generar muchos ingresos, pero nadie quiso hablar de ello en la conferencia de prensa anual. ¿Cuándo volverá SAP a ser amable con sus clientes?