Después del crecimiento es antes del crecimiento
Nos encontramos en una situación que parece irreal. Muchos libros y películas sobre el brote de "virus asesinos" muestran la lucha heroica y su contención por unos pocos protagonistas.
No necesitábamos la transformación de estos temas cinematográficos en realidad. Lo que resulta evidente es que no son los héroes de las películas los que se revelan como héroes en la crisis, sino la gente corriente que trabaja en ámbitos que -cuando están enfermos- nos mantienen con vida o, de forma aún más mundana, mantienen en funcionamiento las infraestructuras, proporcionan seguridad...
Lo que también es evidente es que aquellas empresas son más fuertes en sus respectivos sectores que están más adelantadas en automatización y transformación digital que otras.
Preparar y planificar
Esto ya es evidente cuando se trabaja con empresas que ya no pueden mantener sus propias operaciones en funcionamiento porque no han creado los requisitos técnicos previos con antelación. Los principales problemas que veo son la falta de líneas VPN, la escasez de dispositivos móviles, la falta de ancho de banda y, por supuesto, la falta de licencias.
Además, la falta de una estructura de seguridad para poder procesar los datos de los clientes y de la empresa desde la oficina en casa. También se menciona en algunos casos el bloqueo del uso compartido de archivos (incluido el uso de almacenamiento compartido en la nube). En algunos casos, también hay una falta de opciones de videoconferencia, o la gente tiene que trabajar con soluciones gratuitas y no seguras.
En la mayoría de las empresas de TI, el "trabajo móvil" es la norma desde hace tiempo. No me refiero a los "nómadas digitales", que pueden trabajar desde cualquier lugar del mundo siempre que dispongan de un acceso (razonablemente rápido) a Internet y un adaptador de corriente adecuado para su portátil.
Para muchos empleados que trabajan en una oficina doméstica, esto también incluye partes de la infraestructura con la que están familiarizados desde la oficina, es decir, la posibilidad más bien mundana de imprimir y escanear o una segunda pantalla y acceso remoto a importantes recursos internos.
Soy optimista y creo que, al menos en este caso, se encontrarán soluciones a posteriori para la mayoría de las empresas, aunque haya que realizar inversiones -previstas para más adelante- para ello.
Comunicación y digitalización
También se digitalizará la comunicación con clientes y proveedores. Esto permitirá que los procesos se activen automáticamente o que los documentos y decisiones (como los pedidos) se intercambien digitalmente y a prueba de auditorías.
También aquí hemos visto en las últimas semanas lo difícil que es para algunas empresas pasar con éxito las cadenas de aprobación o apoyar a sus socios comerciales para que lo hagan.
Otro paso muy importante es la optimización de los recursos disponibles. Esto comienza con la visibilidad de los propios niveles de existencias, que pueden llegar rápidamente a cientos de ubicaciones de almacenamiento para un minorista.
Pero incluso en la producción, los mismos materiales y medios de producción se distribuyen a menudo en distintos lugares. Una mayor visibilidad sirve para abastecerse rápidamente por cuenta propia sin tener que acudir al tercer mercado.
Una vez implantado, ahora se puede comprobar la disponibilidad en la propia zona de influencia, además de la situación del suministro en los proveedores.
Mis consejos cinematográficos si te apetecen películas sobre pandemias: "El séptimo sello" (1957), una película histórica atmosféricamente muy densa sobre la época de la peste, y "Contagio" (2011), una película de Hollywood sobre el brote de un virus mortal.
Por favor, ¡manténgase sano!