Ha llegado el momento de la salida de la hoja de cálculo
Los especialistas cualificados plantean grandes exigencias al lugar de trabajo y también al propio trabajo. Si la contabilidad quiere tener éxito en la contratación, debe despojarse de su imagen anticuada y atraer a la gente con métodos de trabajo modernos y proyectos interesantes. Pero, ¿cómo conseguir que la profesión de contable sea tan atractiva que los jóvenes se sientan atraídos por ella?
Básicamente, es muy sencillo: la razón por la que la contabilidad tiene una imagen polvorienta radica en las tareas repetitivas que un empleado de contabilidad tiene que hacer mes tras mes.
Por eso, mucha gente cree que un contable sólo se preocupa a diario de las listas, las contabilidades y las cuentas. Pero eso puede cambiar. Estas tareas rutinarias y procesos repetitivos pueden normalizarse y automatizarse.
Las empresas que apuestan por la automatización incluso matan dos pájaros de un tiro: en primer lugar, mejoran sus flujos de trabajo, reducen la tasa de errores, garantizan la transparencia y aumentan la eficacia.
En segundo lugar, crean espacio para otras tareas nuevas, analíticas y mucho más interesantes. Esto las hace más atractivas y aporta un enorme valor añadido a la empresa.
Siempre lo hemos hecho así
Pero, ¿por qué muchos contables siguen utilizando herramientas tradicionales para su trabajo a pesar de estas posibilidades y de un aumento exponencial de los datos? Por qué son incapaces de decir adiós a las hojas de cálculo, la "manta de confort de las finanzas"?
Esto se debe probablemente al hecho de que la globalización ha aumentado tanto el volumen de transacciones como el número de sistemas diferentes de los que hay que extraer información, y éstos aún pueden conciliarse fácilmente con las hojas de cálculo tradicionales.
Desde hace tiempo existen soluciones que pueden aliviar esta situación y garantizar la exactitud de los datos y el cumplimiento de la normativa.
ERP como columna vertebral de las finanzas modernas
Los modernos sistemas ERP y de contabilidad ya garantizan la automatización de un gran número de transacciones recurrentes y el procesamiento de grandes volúmenes de datos en cuestión de segundos, incluso más allá del sistema ERP.
Estos valores añadidos deben comunicarse al mundo exterior. La automatización de la contabilidad alivia la carga de trabajo, reduce la tasa de error, aumenta la transparencia, garantiza cifras válidas en tiempo real, incrementa la eficiencia y crea opciones de análisis completamente nuevas y margen para tareas más importantes.
En una economía cada vez más dinámica y con una creciente escasez de mano de obra cualificada, no hay alternativa a esta tecnología: las empresas que quieran seguir teniendo éxito deben automatizar sus procesos contables.
Sólo así podrán dirigir con éxito su negocio de toda la vida y, al mismo tiempo, ir un paso más allá y dedicarse a tareas más exigentes, como los análisis de riesgos.
Si la función financiera adopta este enfoque, el éxito llega de forma natural: se puede estar seguro de que los resultados son correctos, y el nuevo tiempo ganado, que se crea, por ejemplo, igualando las tareas de cierre de fin de mes, puede utilizarse para análisis y previsiones empresariales.
Las personas motivadas que disfrutan con su trabajo, trabajan con herramientas modernas, participan en la digitalización y tienen un equilibrio positivo entre vida laboral y personal son el mejor reclamo.
La transformación digital de la contabilidad es, por tanto, mucho más de lo que parece a primera vista. La salida de la hoja de cálculo es un cambio cultural que transforma al contable en un contable con carisma, un efecto que no debe subestimarse a la hora de contratar nuevos empleados.