La infraestructura para una mejor cooperación

Como confirma un reciente estudio de IDC, la actitud de las empresas alemanas hacia la nube ha cambiado significativamente en los últimos doce meses. Mientras que antes solo se externalizaban a la nube proyectos individuales o pilotos, dos tercios de las empresas encuestadas prevén ahora utilizar ampliamente servicios externos para sus TI en los próximos 24 meses.

Los impulsores aquí son los departamentos especializados. El estudio "Cloud Computing in Germany 2017" confirma esta tendencia no solo para las grandes empresas, sino también para las pymes.

A pesar de este cambio, en este país sigue prevaleciendo la preocupación por la seguridad y la disponibilidad a la hora de trasladar datos a la nube.

Pero también en este caso las empresas pueden tranquilizar su conciencia eligiendo el proveedor de servicios informáticos y las ofertas de nube adecuados.

Las empresas podrían beneficiarse de un ahorro de costes y tiempo, así como de una mayor flexibilidad en comparación con las soluciones locales, si externalizan la explotación de sus aplicaciones de servicios.

Para garantizar la mayor seguridad posible de sus datos, las empresas deben elegir un proveedor local a la hora de seleccionar un proveedor. La ubicación en Alemania garantiza la protección de los datos del servicio según la legislación alemana o europea.

El centro de datos también debe estar certificado según la norma ISO 27001. ISO 27001 es la principal norma internacional para sistemas de gestión de la seguridad de la información.

Define los requisitos para la introducción, aplicación, supervisión y mejora de un sistema de gestión de la seguridad de la información (SGSI). Así se garantiza la protección de los datos confidenciales contra ataques de piratas informáticos, pérdida de datos y uso indebido o divulgación, y se asegura una recuperación más rápida tras este tipo de ataques.

Para datos especialmente críticos con requisitos de seguridad muy elevados, existe también la certificación según la Oficina Federal de Seguridad de la Información (BSI), que se utiliza sobre todo para el tratamiento de datos personales en el sector financiero.

Disponibilidad

La disponibilidad es otra cuestión que puede causar dolores de cabeza a las empresas que trasladan sus datos de servicio a la nube. Una disponibilidad del 99,9% semanal es habitual, pero también significa que las aplicaciones no están disponibles durante unos diez minutos a la semana en el peor de los casos.

Calculado a lo largo del año, esto corresponde a una pérdida de acceso de 8,7 horas. Para una empresa de servicios que ofrece a sus clientes un servicio de 24 horas los siete días de la semana, esto podría no ser suficiente.

Por una cuota mensual más alta, la fiabilidad puede aumentar, por ejemplo, al 99,999%. Una empresa pequeña o mediana rara vez puede garantizar sólo cinco minutos de inactividad al año en su propio funcionamiento.

Sin embargo, los tiempos de mantenimiento y las actualizaciones planificadas y anunciadas suelen formar parte del tiempo de actividad de los proveedores de servicios en la nube. Por lo tanto, las empresas de servicios deben definir estas ventanas de tiempo con precisión por adelantado en los acuerdos de nivel de servicio con el proveedor.

Integración de proveedores de servicios externos

Una de las mayores ventajas de la computación en nube para las empresas de servicios es que facilita el trabajo conjunto del personal interno y externo en distintas ubicaciones.

En el sector servicios, en particular, existe una clara tendencia hacia la integración flexible de proveedores de servicios externos en los propios procesos de la empresa. Hay muchas razones para ello: Superar los picos de carga, adquirir conocimientos técnicos especiales, dividir los servicios de alto y bajo margen en función de la cobertura regional.

Para poder asignar eficazmente el proceso de un "banco de trabajo ampliado" con varios proveedores de servicios externos, las empresas necesitan una infraestructura moderna. Un enfoque basado en la nube es especialmente adecuado en este caso:

La nube proporciona una infraestructura unificada pero compartible para que el intercambio de datos entre organizaciones pueda llevarse a cabo con mayor rapidez y eficacia.

Inversiones en infraestructura de servidores y licencias

La computación en nube también ofrece a las pequeñas y medianas empresas cuya creación de valor reside en la producción o los servicios la oportunidad de profesionalizar el funcionamiento de sus TI.

Gracias al óptimo equipamiento técnico y a la conexión de red de banda ancha del centro de datos de un proveedor de nube, se benefician de un mayor rendimiento y disponibilidad de sus aplicaciones de servicios. No es necesario invertir en la compra de licencias, infraestructura de servidores, actualizaciones, operación y mantenimiento.

Además, los recursos informáticos en la nube son más baratos para las empresas porque los costes básicos (adquisición, funcionamiento, mantenimiento) son compartidos por varios usuarios.

La facturación mensual en el modelo de suscripción según el número de usuarios crea transparencia de costes y facilita el control.

Maneje los picos de carga con sencillez

Otro potencial de ahorro es para las empresas de servicios que tienen un negocio con fluctuaciones estacionales. Con la computación en nube, no tienen que mantener en espera los recursos informáticos no utilizados para los picos de carga.

Al mismo tiempo, pueden manejar fácilmente cargas de uso pesadas e imprevistas y cumplir los acuerdos de nivel de servicio en todo momento. Los plazos de implantación de nuevas aplicaciones y servicios también pueden acortarse gracias a la nube.

Un buen ejemplo es el despliegue de contadores inteligentes en el sector energético. Con la "Ley sobre la digitalización de la transición energética", el Bundestag desencadenó básicamente un gigantesco proyecto informático en octubre de 2016.

De aquí a 2032 habrá que sustituir unos 50 millones de contadores eléctricos en Alemania y, de paso, instalar una infraestructura informática completamente nueva para hacerlos funcionar.

Para gestionar este proceso de forma oportuna y rentable, puede ocurrir que las capacidades propias ya no sean suficientes y haya que implicar masivamente en el proceso a proveedores de servicios externos.

Las soluciones de medición basadas en la nube son actualmente muy demandadas por este motivo, entre otros. Por un lado, para poder "conectar" rápidamente fuerzas externas. Por otro, porque los recursos adicionales pueden volver a reducirse sencillamente tras el despliegue.

Conclusión

Si las organizaciones se toman en serio la externalización de aplicaciones de servicios, descubrirán que el enfoque de la nube ofrece muchas ventajas y que las preocupaciones sobre seguridad y disponibilidad pueden resolverse eligiendo el proveedor y la oferta de nube adecuados.