"Periodismo "sucio

En Estados Unidos, los artículos de opinión sin atribución se consideran periodismo "sucio". Aunque yo mismo me veo afectado por ello con mi columna E-3, puedo estar de acuerdo con este planteamiento genérico.

Sin embargo, la vida real rara vez se ciñe a la teoría: los artículos de opinión reflejan la visión subjetiva del autor. Su valoración, crítica y análisis pueden ser una valiosa aportación, pero el texto siempre está directamente relacionado con el autor.

En mi caso, me sorprendería mucho que alguno de mis colegas de nuestra mesa de habituales de SAP escribiera lo mismo, parecido quizás.

"Así que te ves como un escritor único" mi mujer comentó el tema del periodismo "sucio" y mi anonimato, que espera que termine más pronto que tarde: Como en mi caso no es posible escribir sin anonimato, si éste cesara, mi mujer ya no tendría que corregir los textos.

Puede ser periodismo sucio publicar un artículo de opinión sin el nombre que defiende esa opinión. Pero, ¿y la otra parte? Mi anonimato me protege de manipulaciones e influencias.

Como n/n, tengo el privilegio de reflexionar sobre lo que ocurre en nuestra comunidad en paz y sin gritos desde fuera. No tengo que tener en cuenta consejos porque la gente quiere que escriba eso y no otra cosa.

El n/n es lo contrario de mi trabajo oficial, donde otras opiniones son bienvenidas, se discuten, se encuentran compromisos. Para mí, el anonimato es un mecanismo de protección y la oportunidad de compartir mis conocimientos y experiencia en beneficio y ventaja de los demás.

Tal vez las n/s que escriben aquí solas estén haciendo periodismo "sucio", como se acusó al New York Times por publicar la pieza anónima sobre el presidente de EEUU, Donald Trump.

Quizá la democracia sea la peor de las formas de gobierno, pero el n/n no conoce una forma mejor. Mientras exista mi anonimato, me permito seguir escribiendo.

Vuelta al trabajo: Como el redactor jefe Färbinger aún no puede saberlo, me hago cargo de su tarea periodística. En un comunicado de prensa de SAP de abril de este año leemos:

"SAP también está introduciendo nuevas normas de organización y gobernanza que establecen una separación estricta entre la organización y los procesos de ventas y la organización de auditoría y sus procesos.

A día de hoy, sigue habiendo desacuerdos entre los clientes y SAP sobre cómo deben interpretarse los contratos antiguos en relación con los nuevos requisitos digitales.

A veces esto repercute negativamente en los debates paralelos sobre la adquisición de nuevo software. Los cambios organizativos por parte de SAP permiten ahora separar estas cuestiones y posibilitan debates independientes."

Los cambios organizativos anunciados en SAP incluyen también una instancia encargada de evaluar, aclarar y, tal vez, resolver de antemano los "conflictos de licencia", con independencia de SAP. Esta importante y honorable instancia ya ha sido creada.

Hay un líder que no está en nómina de SAP y que goza de gran prestigio en toda la comunidad SAP por su experiencia en licencias, auditorías de SAP, gestión de activos informáticos y gobernanza.

Por el momento, todo sigue sin ser oficial y mi conocido dedicado está intentando crear un equipo competente. Hasta el anuncio oficial por parte de nuestro DSAG, puedo revelar lo siguiente: el nuevo "SAP Governance Licence Leader" ya ha aparecido en la portada de la revista E-3.

Gerd Oswald ha vuelto, aunque en realidad nunca se fue. Tras dejar la Junta Directiva de SAP, fundó su propia empresa de consultoría, convirtiéndose así en nuestro miembro del DSAG y ayudando a SAP en casos difíciles.

Como embajador de SAP, ahora está perfeccionando su papel, cerrando de nuevo su propia empresa y convirtiéndose en miembro del Consejo de Supervisión de SAP a partir del 1 de enero de 2018. Además, está ejerciendo como testaferro de Leonardo y ha escrito el prólogo del libro "SAP Leonardo" publicado por Rheinwerk-Verlag: ¡Que triunfe la digitalización!